5.12.2008
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Ay sí mi corazón, ¡ay no! me grita la razón
tanto viento en reversa, cuando el alma aún no piensa
si entre tanto y tonta conversa
si entre tanto sueño y arma perversa
le encontraré un recoveco a la pasión
si entre tanto beso se me entrega el verso.
Si mi alma engaña cuando no plasma lo que añora,
le diré ahora señora, su hija me enamora,
que quiere que le haga si el cerebro no manda
si no hay cola en esta trampa, que sobreviva
con estampa, al embiste de tan vertiginosa pampa
no hay bigote que aguante tan cálido levante,
tanto amor razante,
ni copa que resista,
el júbilo tempranero
de un cariño aguacero.
Si tanta reja que separar pretende,
en el corazón se prende
se quema como el pan caliente
se encoge y se enciende,
se retracta y encanta
como esos ojitos pariera
un día de junio quisiera
por una vez siquiera
saber de primavera,
de los ángeles bebiera,
hasta el último rocío
de su encanto al que canto,
si una vez pudiera, volver mi risa en llanto
sabría por vez primera,
hasta donde llega
la sonrisa de mi canto
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